"Hoy le canto al Amor, al Amor loco..."

- Genial frase de la canción "Amor Libre" de Nach, en la que he pensado bastante hoy, de hecho, no he parado de pensar en lo mismo, ¿Por qué somos capaces de hacer semejantes locuras cuando estamos enamorados? Mi mejor amigo me ha brindado una genial explicación, me ha dicho riendo: "Verás, es que... esos dos sentimientos siempre van de la mano" a lo que yo respondí, que eso yo ya lo sabía, que si me podía decir por qué, y él me ha contado este cuento, que intento escribir lo mejor que sé:

              "Let's Escape Together", por Iggy Blues, visto en Flickr

    Mucho antes de que existieramos los hombres, vagaban por nuestro mundo las esencias de todos los sentimientos que conocemos. Algunas eran buenas como la felicidad o la amistad y otras no tan buenas como la avaricia o la soledad. Pero para cuando ocurrió la historia que entre manos nos traemos, no existían tales conceptos, simplemente sentimientos...


Un día, si se podía llamar así, estaban todos los sentimientos reunidos, cuando el Aburrimiento dijo:

- "¡Me aburro!, podríamos jugar a un juego..."

La Alegría, que no estaba lejos y derrochaba energía, lo escuchó, y en seguida respondió etusiasmada:

- "¡Sí!, ¡Sí!, ¡Sí!, Juguemos...¡Al escondite!"

A lo que el Escepticismo respondió muy serio:

- "¡Pues no se cómo podemos jugar a semejante disparate con todos los que somos la verdad!"

Entonces la Locura intervino diciendo:

- "Bueno, ya que estoy loca, puedo contar yo, ¡a mí no me importa!, como ya estoy loca..."

- "Bien, pues si ya tenemos a alguien que se la quede podemos empezar, ¡vamos!" - Gritó la Alegría.

- "Uno, dos, tres..."


Y así comenzó este particular juego, en el que uno por uno, todos los sentimientos fueron encontrando sus escondites, la Gula se escondió tras un cerezo, donde se comió todas las cerezas que encontró,
la Mentira se escondió detrás de un esquina, ¡mentira! estaba en un rincón de la luna, todos menos la Duda, que nunca era capaz de encontrar un escondite que le pareciera lo sufcientemente bueno.

- "Noventa y nueve, ¡cien!, ¡Voy!"


Y la Locura se dio la vuelta y... ¿adivináis a quién vio? ¡a la Pereza! que no había querido buscar ningún escondite:

-" ¡Te vi!"

-" Ya, eso quería, supone demasiado trabajo para mí encontrar un buen escondite..."

Siguió buscando, y justo después vio a la Duda, que no habia sido capaz de encontrar un escondite que la convenciera del todo. Continuó su busqueda y decidió entrar en una cueva oscura y fría, donde encontró a la soledad, tan solita como siempre. Uno a uno fue encontrando la Locura a todos los sentimientos, a todos menos a uno, que era el que mejor sabía esconderse, ya que era demasiado sutil para ser visto fácilmente, hablo, claro, del Amor. Tras buscar y buscar y no poder encontrarle, la Envidia, que había sido descubierta hacía un buen rato, se enfadó, y le gritó a la Locura:

-" ¡Allí!, ¡está allí!, ¡tras esas zarzas!"

Entonces, la Locura fue corriendo hacia las zarzas gritando "¡Que voy!" y el Amor, tan sensible y frágil como siempre, al ver a la locura venir tan deprisa y escandalosamente, se asustó mucho e intentó salir corriendo, con tan mala suerte, que se clavó las espinas de las zarzas:

-" ¡¡¡Aaahh!!!, ¡Socorro!, ¡que alguien me ayude!"

-" ¿Que te pasa Amor?" - Preguntó asustada la Locura.

-" Me has asustado Locura, y sin querer me he clavado las espinas de estas zarzas en los ojos, ¡no veo nada!"

-" ¿¡Por mi culpa?! ¡no puede ser! ¡Los siento muchísimo!, ¡esto me pasa por ir tan alocada!, ¡Dime que puedo hacer para arreglarlo!"

-" Tranquila Locura, no hace falta que hagas nada de verdad" - Dijo el Amor con todo el cariño que pudo, al ver la preocupación de la Locura.

-" ¿¡Como no voy ha hacerlo?!, ¡quedarás ciego!, ¡ya sé!, te cogeré de la mano y yo te guiaré, así, ¡siempre podrás ver!"

Y desde entonces, es por esto que el Amor es ciego, y que el amor y la locura, simpre van de la mano, sin poder existir el uno sin el otro, complementándose el uno al otro, en el sentimiento mas bello y fuerte que existe, que es capaz de hacernos hacer cosas realmente maravillosas.


Es muy difícil decir qué es exactamente el amor, pero os puedo decir qué no lo es y de paso animaros un poco el día, porque ni razón ni humor le faltan:
noesamor.es